El Yo Ideal y el Yo Real
Otra vía para la depresión.
Comentarios realizados por el Prof. Jorge Olguín.
Luego de haber leído un libro del Dr. Jorge Bucay donde
se hablaba del YO IDEAL y el YO REAL, decidí hacer
este humilde comentario:
Partamos de la base de que todos tenemos un YO IDEAL,
el que deberíamos ser. Y un YO REAL, el que somos.
Si los comparamos tomaremos conciencia del déficit,
debido a que lo que aspiramos ser no es lo que vemos
en nosotros generalmente.
Ahora tomemos una persona hipotética como ejemplo
para lo que voy a tratar. Esa persona tiene, como todos,
esos 2 Yoes.
Pero cuando el YO IDEAL y el YO REAL no le
producen déficit en la comparación, es porque no tiene
ese resultado de déficit al restar el YO REAL al YO
IDEAL. No porque se considere perfecta (eso sería Ego),
sino porque sus metas espirituales se van cumpliendo
en una eterna búsqueda.
Quizás determinada persona no está conforme consigo,
pero no busca ser la persona IDEAL. Le basta, tal vez,
con saber que sigue aprendiendo, y creciendo.
Mas... ¿Qué sucede si esa persona tiene un entorno
directo que busca lastimarse? Supongamos que ese
entorno posee un YO REAL que no le produce conflictos
de ninguna naturaleza, pues cree que ese es el YO IDEAL?
Pueden ser una hija, una madre, una pareja... con una
mente reactiva tan productiva que vive generando un Ego
protagonista, y están cómodas en ese rol. Y entonces,
la primer persona, que las ama, desea que cambien para
mejor... pero no para su satisfacción, pues eso sería
Ego de parte de esta persona. Porque cambiarían por
una necesidad de esa persona y eso no estaría bien.
El aparente drama es que hay gente que ve desde "fuera
de la pantalla" como aquellos que estiman, aman o
sienten afecto, sufren en ese rol protagonista. Alguno de
ellos se conflictúan al comparar su YO REAL con su
YO IDEAL. Otros, se conflictúan al creer que su YO
REAL "es" su YO IDEAL, y actúan en consecuencia,
enceguecidos por su Ego. De esa manera, pueden llegar
a herirse emocionalmente unos a otros.
Entonces, reiterando, puede haber una persona que desea
que su entorno cambie para la propia felicidad de ellos.
También puede desear que prioricen los intereses de su
prójimo sobre los propios. Y al ver que eso solo queda
en expresión de deseos, le invade a la persona la
frustración. Ese fracaso provoca finalmente en ella una
depresión.
Porque esto es más difícil que si el conflicto fuera con
su propia persona: allí el método sería cancelar la
idea de que debe ser de una manera determinada y
así no habría conciencia de déficit. Mas si el conflicto
es de la gente que esa persona quiere, es difícil que no
se involucre. Y sufrir "por el otro" no es Ego.
Claro, si nos ponemos del otro lado, los aparente-
mente conflictuados pueden pensar que la otra persona
cree tener el derecho de ser perfeccionista con ellos
y hacer caso omiso de la misma. Pero la intención de
la primera no es decirles cómo deberían ser, sino
evitar que su egoísmo los consuma.
Por último, algo que quedó "en el tintero". Se habló
de aquellos que se crean conflictos al creer que su YO
REAL es su YO IDEAL y se creen perfectos.
También se habló al comienzo de una persona hipotética,
donde su YO IDEAL y su YO REAL no le producían
déficit al restar el segundo. ¿Cuál es la diferencia en
ambos casos? En que la persona hipotética descarta
su YO IDEAL e intenta que su YO REAL esté en la
búsqueda del Despertar, para buscar así luego la tan
nombrada Iluminación. Y esa Iluminación le traerá a
la persona, por añadidura, una sincera vocación de
Servicio.
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