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Sesión con el arconte Ezequiel

Grupo Elron

 

Sesión del 27/07/2025

 


 

Médium: Jorge Olguín.

Entidades que se presentaron a dialogar: Johnakan y el arconte Ezequiel.

 

Johnakan dialoga con el Elohim Ezequiel acerca de la posibilidad que tiene un dios menor de tomar forma humana para llevar a cabo una misión en el plano físico. La entidad arconte, Ezequiel, responde a las sustanciosas preguntas de Johnakan que no han estado hechas anteriormente acerca de su comportamiento, la corporización, los dones que llegan a tener y la existencia de entidades mitológicas.

 

 

Johnakan: Mi nombre es Johnakan, entidad espiritual de luz. Si bien he vivido distintas situaciones, experiencias de conocimiento me llevé una sorpresa cuando se contactó conmigo una entidad de un plano más elevado que el mío.

-¿Quién eres? -le pregunté.

 

Ezequiel: Soy un arconte, aunque también me conocen como Grigori. Tengo el Don de corporizarme en un cuerpo humano, donde he adoptado el nombre de Ezequiel.

 

Johnakan: ¿En qué plano suprafísico estás?

 

Ezequiel: Moro en el plano 8.

 

Johnakan: Pero dices ser un arconte -comenté, todo conceptualmente, obviamente.

 

Y me respondió.

 

Ezequiel: Soy un arconte.

 

Johnakan: Pero el plano 8 es el de los Elohim.

 

Ezequiel: Sí, así es.

 

Johnakan: Coméntame, entonces, porque moras en ese plano.

 

Ezequiel: Te lo voy a explicar, Johnakan.

 

Johnakan: Está bien, pero… exactamente, ¿qué eres?

 

Ezequiel: No es sencillo de digerir conceptualmente, pero soy parte de dos Elohim.

 

Johnakan: Estimado Ezequiel, los Elohim son dioses menores y por el hecho de ser seres suprafísicos es imposible que tengan descendencia.

 

Ezequiel: Y es correcto, querido Johnakan.

 

Johnakan: ¿Entonces?

 

Ezequiel: No soy puntualmente hijo de dos Elohim, soy, ¿cómo explicarlo?, un desprendimiento de ellos.

 

Johnakan: ¿Cómo sería eso, estimado Ezequiel?

 

Ezequiel: Hay Eloah, querido Johnakan, que buscan expandirse sin un propósito específico y al juntarse dos 'dioses menores', es tal la energía que emanan, que logran que un segmento de esos dos Elohim se desprenda.

 

Johnakan: ¿Y así te has formado tú?

 

Ezequiel: Así es, pero no sólo yo… hay cientos de arcontes o grigoris.

 

Johnakan: -En algunas religiones se habla de vosotros.

 

Ezequiel: Así es, pero obviamente, fuera de las religiones lo toman como algo mitológico.

 

Johnakan: Lo sé, pero además el gnosticismo los interpreta como seres protectores, no así la religión que les da otro significado, viéndolos como seres del mal.

 

Ezequiel: Es correcto.

 

Johnakan: Pero fundamentalmente, ¿tenéis una misión?

 

Ezequiel: Sí, querido Johnakan, podemos corporizarnos y tomar forma humana.

 

Johnakan: ¿Habláis de que todos vosotros pueden encarnar?

 

Ezequiel: No, no encarnamos como las entidades espirituales o las entidades angélicas. Directamente podemos corporizarnos, tomando forma física.

 

Johnakan: Apreciado Ezequiel, en algunas religiones dicen que vosotros habéis copulado con mujeres del plano físico y por eso habéis sido castigados por un dios menor.

 

Ezequiel: No hace falta que te lo aclare, querido Johnakan, tú sabes bien que eso fue escrito por los religiosos. Quien más se acerca a una supuesta verdad es el gnosticismo y no la religión. Así y todo, lo que saben, es poco y nada prácticamente.

 

Johnakan: ¿Y tú has tomado forma física?

 

Ezequiel: Sí.

 

Johnakan: ¿Y por qué te contactas conmigo?

 

Ezequiel: Porque la parte humana de tu 10% encarnado puede contarlo.

 

Johnakan: Entonces cuéntame sobre esa misión.

 

Ezequiel: Lo haré. Obviamente en el plano físico encarné con el nombre de Ezequiel, pero adopté otro nombre más acorde a esta época: Robert Nightman.

 

Johnakan: ¿Y qué sucedió?

 

Ezequiel: Me enamoré de una joven que era un ángel encarnado como mujer y se llamaba Dafnir. Obviamente, también se adaptó a la época actual y adoptó el nombre de Ana Ferguson.

 

Johnakan: ¿Ella supo quién eras tú?

 

Ezequiel: Sí, querido Johnakan, se lo dije.

 

Johnakan: ¿Formaron pareja?

 

Ezequiel: Sí. Nos amábamos con un amor intensísimo como jamás había sentido antes y tengo más de diez millones de años, pero le dije a Dafnir que era tanta mi energía, aun en forma física, que si ella quedara embarazada moriría en el parto. Dafnir no prestó atención a ello, lo único que me preguntó fue:

-"El hijo o hija que naciera de mí vientre, ¿sería un ser especial, un arconte como tú?

-"No, no -le respondí-. el hecho de ser mitad arconte o grigori y mitad humana, puesto que tú estás encarnada, Dafnir, tendría dones como nadie en el planeta, pero sería humano. El problema es que tú no sobrevivirías al parto, por lo tanto, no podremos tener descendencia".

 

Johnakan: ¿Y qué te respondió, estimado Ezequiel?

 

Ezequiel: Que su anhelo era tan grande como su amor hacia mí y su deseo era tener descendencia, aun a costa de su vida.

 

Johnakan: ¿Y qué sucedió?

 

Ezequiel: Por supuesto, quedó embarazada y tuvimos un hijo llamado Peter, quien no conoció a su madre.

 

Johnakan: ¿Y a ti te conoció?

 

Ezequiel: No en ese momento; tenía dos ayudantes humanos que trabajaban para mí, Velkan y Margit, quienes entregaron a la criatura a un internado con órdenes estrictas al director del mismo de cuidarlo y con un poder judicial para emanciparlo a los dieciséis años, dejándole una inmensa fortuna.

 

Johnakan: Y tú, querido Ezequiel, ¿cómo has obtenido, estando corporizado en un ser humano, esa fortuna?

 

Ezequiel: Soy prácticamente parte de dos dioses menores y tengo la potestad para lograr invertir desde prácticamente cero hasta ser billonario. Una vez que supe que mi hijo estaba en buenas manos, dejé provisoriamente mi parte humana.

 

Johnakan: ¿Y no has vuelto a corporizarte?

 

Ezequiel: Sí, dos años después. Pero esa es otra historia tan bonita y a la vez tan triste, porque por segunda vez volví a enamorarme, por segunda vez tuve descendencia y por segunda vez perdí a mi amor que, al igual que Dafnir, era una entidad angélica encarnada y tuvo el mismo anhelo que Dafnir, tener descendencia, aun sabiendo que sacrificaba su vida.

 

Johnakan: -Estimado Ezequiel, gracias por contactarte conmigo, sé que me has respondido, pero quiero dejar aclarado que en los planos suprafísicos, al no tener materia, no podemos reproducirnos.

 

Ezequiel: Estimado Johnakan, todos los seres vivos suprafísicos fuimos creados por el ABSOLUTO y si bien somos parte de ÉL, pues el mismo universo es SU Manifestación, ¿por qué somos independientes?

Alguna vez, Johnakan, tú has dicho que cuando venga el Big Crunch las gotas (nosotros) se fundirán con el mar (EL ABSOLUTO) y serán el mar. ¿Acaso no somos el mar ahora si estamos dentro de nuestro PADRE?

 

Johnakan: Sí, obviamente.

 

Ezequiel: Bueno, de la misma manera la energía de dos Elohim puede hacer una especie de MITOSIS SUPRAFÍSICA para crear grigoris o arcontes.

Te preguntarás, Johnakan, ¿cómo nosotros y las entidades angélicas podemos encarnar y vosotros directamente os corporizáis? Solo puedo decirte que nosotros, los grigoris o arcontes tenemos el Don de corporizarnos.

 

Johnakan: Estimado Ezequiel, ¿y los demonios y otros seres míticos?

 

Ezequiel: Los demonios son entidades angélicas que perdieron su memoria suprafísica y moran en catorce planos de oscuridad que, a su vez, pueden interactuar con todos los planos espirituales y angélicos. Pero como no tienen memoria encarnativa, le sirven al PADRE para probar a los seres encarnados, tentándolos.

 

Johnakan: ¿Cuál sería el objetivo?

 

Ezequiel: Saber qué seres encarnados dominan su propio ego y cuáles ceden al mismo.

Y obviamente, la mayoría cayó en la tentación.

 

Johnakan: Apreciado Ezequiel, no me quedó claro lo de la MITOSIS SUPRAFÍSICA.

 

Ezequiel: La MITOSIS SUPRAFÍSICA es el proceso de división donde una parte de la esencia de un Eloah se une con la parte de la esencia de otro Eloah y producen una esencia independiente y diferente, con dones superiores a las esencias originales, pudiendo dicha entidad corporizarse en un ser material con habilidades o capacidades fuera del alcance de otro ser físico.

 

Johnakan: Lo que tú me comentas lo entiendo perfectamente. Pero sabes que yo he estado en distintos universos alternos.

 

Ezequiel: Sí, lo sé…

 

Johnakan: Bien… pero hay un universo alterno donde moran seres mitológicos. Por ejemplo. En un universo alterno, la ciudad de Viena se llama Vaquia. Y allí hay demonios crueles que hasta quitan vidas.

 

Ezequiel: Bueno, eso se debe a que esos mismos demonios tienen un ego muy potenciado, sumado a una extrema crueldad. Con el agravante que no precisan encarnar como una entidad espiritual o angélica, sino que pueden corporizarse como nosotros, los arcontes e incluso desvanecerse si se ven en un aprieto.

Además, pueden llegar a vencer a los hijos que podríamos tener nosotros, los arcontes, con una mujer humana.

 

Johnakan: Ezequiel, tú me habías dicho que te habías enamorado de una humana llamada Dafnir y que ella sabiendo que al tener un hijo o una hija moriría en parto y eligió sacrificar su vida. Cuando tú la conociste adoptaste el nombre de Robert Nightman. O sea, tu hijo se llama Peter Nightman, ¿qué dones tiene?

 

Ezequiel: Bueno, los dones de Peter en el plano físico son especiales. Cualquier entidad, sea espectro, sombra viviente, vampiro o licántropo se pueden convertir en polvo, desvaneciéndose en el aire, si mi hijo los toca. Sin embargo, hay licántropos pacíficos, que se llevan bien con Peter.

 

Johnakan: Querido Ezequiel, ¿qué pasó luego contigo?

 

Ezequiel: Ya te contaré...

 

Johnakan: Apreciado Ezequiel, me ibas a contar que sucedió luego contigo.

 

Ezequiel: Sé que vosotros, en el plano físico, podéis enamoraros más de una vez, pero siempre hay algún amor que sobresale. En el caso de nosotros, los arcontes, nos enamoramos una sola vez, pero a mí me pasó algo fuera de lo común; pasaron dos años y conocí a una entidad angélica encarnado. Era una joven muy parecida a Dafnir, con un carácter muy similar, llamada Lunir. También adoptó el nombre de esta época: Ingrid Bauer.

Salimos como amigos un tiempo y finalmente nos enamoramos. Obviamente, al igual que con Dafnir, le dije a Lunir quien era. No se asustó ni se sorprendió. Lo aceptó y llegó el momento de decirle que evitáramos que se embarace, porque era una muerte segura para ella si generaba una nueva vida de un arconte. Y Lunir, al igual que Dafnir, lo aceptó y tuvimos un hijo llamado Dominik.

 

Johnakan: ¿Y qué sucedió con Dominik?

 

Ezequiel: Bueno, así como en el nuevo continente tuve dos ayudantes, Margit y Velkan, en el viejo continente tuve un ayudante llamado Enio. Enio se encargó de llevar a Dominik a un orfanato, en Viena.

 

Johnakan: ¿Y lo adoptaron?

 

Ezequiel: Sí. Tuvo la suerte de ser adoptado por un matrimonio de apellido Haider. Aclaro que al igual que con Peter, le dejé una enorme fortuna que recibiría al emanciparse.

Cuando su padre adoptivo falleció, se quedó con su madre, que todavía vive. Es una señora amorosa.

El tema es que Dominik, siendo dos años menor que Peter, fueron parte de algo llamado CAUSALIDAD.

 

Johnakan: Explícate, por favor.

 

Ezequiel: Ambos hermanos se conocieron.

 

Johnakan: ¿Cómo?

 

Ezequiel: Dominik y su novia viajaron a Nueva York y se conocieron con Peter y su novia Lucy.

 

Johnakan: ¿Tuvieron noviazgos similares?

 

Ezequiel: No, para nada. Las historias son distintas. Peter conoció a Lucy en el último año de la escuela secundaria, que en Nueva York llaman high school.

En el caso de Dominik y su novia fue distinto, porque cuando se conocieron en la escuela no se llevaban bien.

 

Johnakan: ¿Por qué?

 

Ezequiel: Porque ella sospechaba de Dominik y mi hijo de ella. Ambos pensaban que el otro era un ser mítico, hasta que finalmente el tema se aclaró.

 

Johnakan: Te quiero preguntar algo más para no tomar tanto de tu tiempo: ¿Los has conocido? ¿Saben Peter y Dominik que eres su padre y además, que eres un arconte?

 

Ezequiel: En este caso fue al revés, se enteró primero Dominik, mi hijo menor, y luego Peter. Y ahora los voy a juntar a los cuatro, a mis dos hijos con sus novias en Vaquia, en el universo alterno.

 

Johnakan: Quería comentarte la información que los humanos tienen sobre vosotros: Los Grigori (del griego egrḗgoroi, que significa Observadores o vigilantes), también conocidos como hijos de los Elohim. En estos textos se menciona que los Grigori fueron seres que se enamoraron y se aparearon con las "hijas del hombre". O sea, ¿Peter y Dominik son semidioses?

Ezequiel: No, son seres humanos con dones especiales. Ya hablamos sobre ese tema.

 

Johnakan: Como conceptuamos antes, ¿Vaquia es una ciudad alterna a lo que en este universo sería Viena, capital de Austria?

Ezequiel: Correcto.

 

Johnakan: ¿Y Dominik tiene los mismos dones que Peter, no hay nada que los pueda vencer a ambos?

 

Ezequiel: Sí, los pueden herir y hasta matar los demonios y otros seres mitológicos. No se hacen polvillo como sí se pueden hacer los hombres lobo y los vampiros si mis hijos los tocan.

 

Johnakan: Entonces no tienen tanto poder como tú. A ti no te pueden dañar.

 

Ezequiel: No, Johnakan, a mí no me pueden dañar. Pero esa vulnerabilidad de mis hijos la voy a solucionar.

 

Johnakan: ¿Cómo lo harás?

 

Ezequiel: Ya te contaré. Ahora quería tratar un tema más grave. Hay un grigori o arconte que tiene un ego tan o más grande que los mismos demonios.

 

Johnakan: ¿Cómo puede ser?

 

Ezequiel: Es muy sencillo, querido Johnakan, ¿acaso tú no sabes que hay Eloah con tremendo ego como lo son Elión y otros similares?

 

Johnakan: Sí, sí, por supuesto.

 

Ezequiel: Bueno. Imagínate una partición de dos Elohim egoicos, una Mitosis Suprafísica. Obviamente, el arconte resultante de dicha mitosis va a tener ego empapado de maldad.

 

Johnakan: Coméntame de ese arconte…

 

Ezequiel: Conoció a una entidad angélica encarnada.

 

Johnakan: ¿Me puedes decir, por favor, el nombre del arconte?

 

Ezequiel: Semyazza.

 

Johnakan: ¿Y la entidad angélica encarnada?

 

Ezequiel: Sophie. Y, al igual que Dafnir y Lunir, adoptó un nombre acorde a la época: Carol Ritcher. Y obviamente en este caso ella se enamoró de él, aunque Semyazza no sentía nada por ella. Él la usó para tener un hijo que tenga los mismos dones o poderes que Peter o que Dominik.

 

Johnakan: ¿No le dijo que ella moríría en el parto?

 

Ezequiel: No, no le importaba. Solo le importaba tener un hijo humano.

 

Johnakan: ¿Y qué sucedió?

 

Ezequiel: Bueno, logró su cometido, sacrificando a Sophie. Tuvo un hijo llamado Stein.

 

Johnakan: ¿Cómo se crio Stein?

 

Ezequiel: Bueno, en este caso Semyazza se hizo llamar Ritcher, Stein Ritcher. Y a su hijo le puso el mismo nombre y también le dejó una gran fortuna.

Además, estuvo con él hasta sus diez años, llenándole la cabeza de maldad y explicándole cómo aprovechar los dones que tenía. Al cumplir Stein los diez años, Semyazza le comentó que se tenía que marchar y dejó un apoderado para que, a sus dieciséis años, lo emancipe y le diera la fortuna que le había dejado.

 

Johnakan: ¿Le llegó a contar a su hijo que él era un arconte?

 

Ezequiel: Le dijo que era un ser poderoso, nada más que eso. Y hasta incluso fingió con llanto, con los familiares de Carol Ritcher, de la muerte de ella. No sorprendió a nadie porque hay muchos casos donde una parturienta muere.

Semyazza fue listo. Antes de marcharse dejó a Stein a cargo de un apoderado, alejando a la familia de Carol.

La cuestión es que Stein tiene en este momento la misma edad de mi hijo menor, Dominik, y va a la misma facultad.

Aclaro que Stein tiene las mismas debilidades que Dominik y Peter con respecto a los demonios y otros seres mitológicos. Stein puede vencer a vampiros y a licántropos, pero no a demonios.

 

Johnakan: Queda claro que Stein sabe que tiene esos dones, pero que es vulnerable a demonios. ¿Tú has confirmado que el joven es cruel?

 

Ezequiel: No, no lo confirmé. Si bien Semyazza se encargó de exacerbar los roles del ego de su hijo, no llego a percibir que Stein sea despiadado como su padre.

En este momento Semyazza no está corporizado, pero igual voy a estar en alerta permanente.

Es todo por ahora, querido Johnakan.

 

Johnakan: Gracias por transmitirme tu Concepto, apreciado Ezequiel. Entiendo que la Mitosis Suprafísica es un nuevo Paradigma.