Índice

Psicointegración - El conocimiento limitado

Grupo Elron
Sección Psicointegración y Psicoauditación - Índice de la sección - Explicación y guía de lectura de la sección

 

Psicointegración 04/09/2014

Médium: Jorge Raúl Olguín

Entidad que se presentó a dialogar: Johnakan Ur-El

 

 

Johnakan nos recuerda que pese a todo, nuestro conocimiento figura como estar dentro de una pecera donde solamente podemos conocer lo que está a nuestro abasto pero no lo de más allá. Es más, ni siquiera podemos imaginar qué más hay puesto que no tenemos ninguna referencia. No se puede pensar en algo del cual nunca se ha tenido un conocimiento previo de ello, si no hay un precedente.

 

Sesión en MP3 (1.036 KB)

 

Johnakan: El ser humano que estudia las tradiciones gnósticas o bien el comportamiento humano a través de las distintas épocas y cómo fue modificando sus creencias, cómo fue respetando sus costumbres separando lo mítico de lo histórico real, aceptando ambos. Y fue la única manera de no enfrentar lo mítico con lo histórico. Mas quizá su concepción quedó atada a una región, a la historia de una región y a medida que la civilización fue creciendo, a medida que los estudios fueron puliéndose la compresión se fue ampliando, pero llegó a un límite, al límite de este mundo.

 

En la parte del misticismo, una parte pequeña de la gnosis, siempre se estudió este mundo a partir desde el origen bíblico en adelante. Y he aquí el dilema, que al abarcar solamente un micro fragmento de la totalidad quedó allí. Entonces todo aquello que se practica a nivel ritualístico, a nivel gnóstico no pasa de ese micro fragmento. Que por otro lado es lógico y coherente que así sea.

 

Se sabe que el Absoluto se manifiesta en todo el universo, en los millones de sistemas estelares de esta galaxia y en los miles de millones de galaxias, cada una de ellas con millones de sistemas estelares pero estudiamos lo que conocemos, profundizamos en lo que sabemos, nos enriquecemos en lo que profundizamos y practicamos porque no podemos ir más allá, porque el conocimiento, valga la redundancia, tiene el límite de lo conocido y más allá no puede ir. Y si bien la sabiduría es innata también debe alimentarse de ese conocimiento. No podemos deducir un camino si no tenemos una programación del punto de partida.

 

Lo irónico en todo esto es que nuestra mente se adapta a ese micro fragmento que estudia y caemos en una ilusión de que abarcamos la totalidad y guardamos lo que descubrimos como si fuera algo propio, como si fuera innato, no aprehendido de afuera. ¿Pero qué es lo que hemos aprehendido? El micro fragmento, lo que ni siquiera estamos convencidos de que lo conocemos, que lo incorporamos y que lo edificamos en nosotros mismos.

 

Saliéndome un poco del tema, en algún momento dije "Lo válido es el dato estable". Con ese dato estable nos manejamos con nuestra vida, hacemos nuestros proyectos y edificamos nuestro futuro, todo en base a ese dato estable que el día de mañana puede ser reemplazado por otro dato estable. De lo contrario, de no ser así y de aferrarnos a una tradición corremos el riesgo de encallar entre las rocas y no hacernos más a la mar porque estamos atrapados en ese micro dato. Pero como es nuestro dato estable nos aferramos a él, somos maestros de ese micro dato. Pero no deja de ser una infinitesimal parte del Todo que como ignoramos que hay más allá, cómo se desenvuelve la vida más allá, la vida física, no podemos dar otro paso. Porque no se puede dar un paso a lo que no se conoce.

 

Pero sabemos que hay más allá, entonces no nos sentemos en el trono. No nos sentemos en ese trono auto convenciéndonos de que llegamos porque aunque nosotros mismo decimos "La vida es un eterno aprendizaje y aprendemos hasta el último día de esta encarnación" no olvidemos un gran detalle: vamos a aprehender lo que está a nuestro alcance. Es como si este hábitat, nuestra historia, todo lo que tenemos, el misticismo, todo lo escrito hasta ahora fuera un pequeño cuarto donde nos hace entrar y hubiera diez o doce libros al azar, los leemos uno por uno y cuando terminamos el último tomo dijéramos "Ya sé todo" ¿Todo? ¡Lo de ese pequeño cuarto que hace las veces de biblioteca! Pero hay cientos y miles de pequeños cuartos, de pequeñas bibliotecas que no conocemos. Pero este es nuestro dato estable.

 

Ergo no presumamos de lo que conocemos porque es una ínfima parte. Y podemos ir subiendo grado tras grado, título tras título pero siempre va a ser una ínfima parte y si por cada porción de aprendizaje nos ponemos una pequeña estrella dorada sobre los hombros, todas las estrellas juntas que podamos cargar en nuestras espaldas no van a significar nada comparado con lo que aún nos resta conocer y que ni siquiera está a nuestro alcance todavía. No presumamos, la humildad es la base de la sabiduría.

 

Es todo por ahora.