Frase aleatoria: La religión mal entendida enseña la ley y no el amor. Los feligreses necesitan que les enseñen el camino hacia la luz con sensibilidad y eso no lo puede hacer ninguna ley, solo el amor. Los dogmas, las costumbres y las tradiciones realizadas en forma automática intentan suplantar el verdadero camino hacia el Padre. Pero esos dogmas se transforman en enormes trabas para encontrar ese camino e impiden el real crecimiento espiritual. Las leyes religiosas son dogmas impuestos en forma arbitraria e impiden razonar en libertad. Muchos "guías espirituales" intentan conducir las vidas de sus seguidores y si estos no siguen sus indicaciones al pie de la letra, les transfieren un complejo de culpa, haciéndoles creer que desobedecen a Dios. No se puede buscar la lealtad a una institución, la lealtad es hacia Dios. Otra